Desde el comienzo de ejecución del Proyecto de acondicionamiento hidráulico del Arroyo Cauce Madre en la diversa de Laredo y Colindres, tanto vecinos de la zona como el PRC de Colindres manifestaron su preocupación sobre las posibles consecuencias negativas que las obras pudieran tener en los edificios y calles colindantes. Actualmente, ya existen hundimientos en el terreno, que seguirán agravando la situación y afectando a la estructura de los edificios vecinos.
El gobierno socialista del Ayuntamiento de Colindres ha ignorado las voces de los vecinos residentes en las urbanizaciones paralelas y colindantes al Regato Madre, preocupados no sólo por la pérdida de aparcamientos que suponía el Proyecto desde su inicio, sino también por la posibilidad de que, al ensancharse el cauce sin establecer una escollera de piedra que protegiese y asentase el terreno, se produzcan nuevos movimientos del terreno que afecten a los pilares de las urbanizaciones.
Además existía un informe técnico, donde se advertía de grietas en los edificios y concluía que los asentamientos en un edificio en general eran normales, si bien en este caso se vieron agrandados por causas ajenas al proyecto y ejecución y se debían a los cambios en los últimos años de las condiciones del terreno y su nivel freático.
El Partido Regionalista de Cantabria presentó la correspondiente propuesta-moción en el Pleno ordinario del 29 de agosto del 2012. En esta pedían, por un lado, que se estudiasen las advertencias técnicas de las urbanizaciones paralelas al regato, por si era necesario reforzar la margen del mismo en término municipal de Colindres. Por otro lado, solicitaban que se modificase el proyecto proponiendo un paseo peatonal de la margen de Colindres “en vuelo” sobre el talud del propio regato, con una pasarela peatonal de madera tratada y protegido con barreras de seguridad vial mixtas de metal- madera, conservando los aparcamientos en líneas existentes.
Esta propuesta fue aprobada por unanimidad, pero el Partido Popular, teniendo un diputado nacional, no hizo nada por conseguirlo.
Las obras del Proyecto fueron financiadas y promovidas por el Gobierno de España a través del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico.